De Enseñanza 69
16 En mi mesa de este tiempo, lo mismo será apóstol el varón que la mujer; a esta mesa sentaré a vuestro espíritu.
17 Han sido las mujeres las que en este tiempo han levantado el estandarte espiritualista delante de las muchedumbres; ellas han ido dejando en el camino la huella del apóstol celoso de la Ley del Señor.
En mi nuevo apostolado estará la mujer al lado del varón y no habrá edades para servirme; lo mismo lo hará el adulto que el niño o el anciano, lo mismo la doncella que la madre, porque vuelvo a deciros que es a vuestro espíritu al que busco y que él tiempo ha que ha dejado su infancia.
27 Después de mi partida muchos se levantarán contra este pueblo, contra mi Doctrina. Los mares serán cruzados por los que vengan a combatir y perseguir a mis siervos, mas ¿quién podrá ocultar la luz del Divino Maestro? ¿Quién podrá detener la evolución del espíritu o hacer retroceder el tiempo?
Si en la Segunda Era la Humanidad creyó que dando a muerte a Jesús sobre una cruz, su Doctrina iba a morir, con su propia mano firmaron su sentencia, porque Cristo desde la cruz con su amor infinito todo lo venció; la verdad, como la luz, siempre triunfa sobre las tinieblas por densas que éstas sean.