De Enseñanza 185
26 Yo soy la esencia de todo lo creado. Todo vive por mi poder infinito. Estoy en todo cuerpo y en toda forma. Estoy en cada uno de vosotros, pero es menester que os preparéis y os sensibilicéis para que podáis sentirme y encontrarme.
27 Yo soy el aliento para todos los seres, porque soy la vida. Por eso os he hecho comprender, que si me tenéis presente en Espíritu, no hace falta que forjéis en barro o en mármol mi imagen para adorarme o sentirme próximo a vosotros. Esa incomprensión sólo ha servido para conducir a la Humanidad a la idolatría.
28 A través de mi palabra presentís la armonía que existe entre el Padre y todo lo creado, comprendéis que Yo soy la esencia que alimenta todos los seres, y que vosotros sois parte de Mí mismo.
29 A medida que comprendéis el sentido de vuestra vida, el destino del espíritu y el porqué de la evolución, insensiblemente vais penetrando en la vida espiritual. Así vais olvidando las formas que me atribuisteis, bajo las cuales me buscasteis, y de vosotros se van borrando las falsas creencias y conceptos erróneos en los que por tantos siglos ha caminado esta Humanidad.
30 El espíritu, por sus dones, podrá elevarse hasta alcanzar su perfeccionamiento. Pero Yo soy el Maestro que siempre he venido a ayudaros en vuestra jornada para que vuestra vida no sea estéril.
31 Si llegáis a ser hombres de buena voluntad, vuestra vida llegará a armonizar con la perfección de toda la Creación, alcanzaréis la luz del verdadero conocimiento y el fruto de vuestras obras os servirá de eterna paz.
Vuestra parte física es substancia que vendrá a diluirse en átomos en la Creación. Esto lo habéis palpado, pero es incomprensible para muchos la vida inmortal del espíritu; comprenden tan sólo aquéllo que sus ojos ven o su ciencia comprueba.
¿Dónde están los que moraron con vosotros en esta vida? No lo sabéis. Si acaso, podéis imaginaros que están morando en una mansión de luz, a lo que el Maestro os dice: Muchos de ellos están cerca de vosotros. El espíritu tiene potencia, tanto para ocupar el lugar que el Padre le ha asignado en el Más Allá, como para desempeñar al mismo tiempo una misión junto a vosotros. He ahí la fuerza del espíritu.
32 Estas lecciones no las habéis comprendido aún, mas para alcanzar el desarrollo de esa facultad sería necesario que en vosotros se cumpla aquello que os dije en el Segundo Tiempo: Es menester que el hombre, para que alcance mi gracia, se asemeje al niño en su pureza.
33 Mas ya no os sintáis solos. En toda buena obra que el hombre realice está la intervención de un espíritu de luz. El mundo espiritual trabaja en las mentes humanas y las guía. Aquel mundo es mayor y más hermoso que éste que con vuestros ojos contempláis. Es un mundo de luz y armonía perfecta. Sus moradores están Conmigo, ellos velan en unión mía por la Creación.
34 Y conociendo y teniendo fe en estas enseñanzas, ¿podréis seguir lamentando que los seres que amasteis en el mundo hayan partido al Más Allá, cuando sabéis que están velando por vosotros? ¿Por qué les recordáis en su forma humana, si ellos ahora sólo son esencia espiritual?
35 Hoy os he hablado sobre lo que vosotros llamáis el misterio de la otra vida.
36 Sólo Yo puedo revelaros estas lecciones; los hombres no lo pueden hacer porque ellos no han penetrado en el Arcano.
37 He tenido que prepararos para que podáis penetrar en mi santuario a escuchar una más de mis lecciones, porque veo que estabais necesitando impresionar primero vuestros sentidos, para que vuestro espíritu pudiera elevarse.
Buscaban vuestros ojos la imagen que pudiera hablaros de mi presencia, vuestros oídos estaban en espera de las notas musicales de los himnos para despojar al corazón de las preocupaciones terrenales, y hasta el incienso y el aroma de las flores os eran necesarios para poder pensar en Mí, aunque fuera por unos instantes.
Mas como el conjunto de toda esa liturgia sólo lo encontrabais en el interior de los templos dedicados a ese culto, fuera de ellos os encontrabais incapacitados para concebir o siquiera sentir mi presencia.
En cambio ahora, vuestra preparación espiritual, en lugar de empezar por desarrollar los sentidos de vuestra materia, ha empezado por el despertar de vuestro espíritu, para venir a terminar en lo que se refiera a la materia.
40 Hoy llegaría a estorbaros cualquier objeto que se pusiera delante de vuestros ojos, y la mejor música os parecería demasiado pobre junto al concierto celestial de mi palabra, y en vez de que os ayudaran en vuestra elevación, podrían llegar a perturbaros. Nada necesitáis ni queréis de lo exterior, por eso es que vuestros ojos han acostumbrado cerrarse durante el tiempo en que estáis recibiendo mi manifestación, porque el espíritu, en el supremo anhelo de elevarse, quisiera despojarse de todo contacto con lo material.
41 Ayer estaba fuera de vosotros el altar que habíais elevado a mi Divinidad, ahora lo habéis levantado dentro del corazón. Vuestra ofrenda, que por mucho tiempo había sido material, ahora la habéis cambiado por una manifestación espiritual.
Sabéis que ante mi vista es más hermoso vuestro amor que la flor más bella de vuestros huertos, y que el perdón que le otorguéis a un semejante tiene ante Mí más valor que el tributo con que antes creíais lavar vuestras manchas.
42 Yo os escucho en el silencio, no necesito que tengáis que mover vuestros labios. No soy el pecador que está escuchando a otro pecador. Estoy en Espíritu, y es a vuestro espíritu al que estoy escuchando, y es él quien trata de elevarse y comunicarse Conmigo.